Tras meses esperando las novedades en el sector móvil el 27 de febrero dio comienzo el Mobile World Congress dando cabida a conferencias y presentaciones hasta el 2 de marzo, día en el que se produjo la clausura del evento. Este año se esperaban pocas novedades y bien cierto es que pocas fueron. Ninguna marca fue capaz de llamar la atención, bueno, ninguna excepto Nokia y Samsung, y es precisamente este hecho el que muestra el poco nivel de innovación de esta edición. Es realmente triste que Samsung levantase más expectación debido a las filtraciones de su S8 que muchas otras marcas que realizaron la presentación de sus dispositivos estrella en el propio MWC, marcas tales como LG, Sony, Huawei o HTC. Recordemos que Samsung realizará la presentación del S8 de forma independiente el 29 de marzo desde la ciudad de New York. Por parte de LG vimos un móvil normal y si, en este caso es una novedad, ya que si por algo es característica la marca Coreana es por presentar año tras año dispositivos innovadores como fue el caso de los botones en la parte trasera en el G2, la carcasa de piel del G4 o el sistema modular (que resultó ser un fracaso) del G5 entre otros. Huawei sigue a buen ritmo, con un P10 muy continuista la marca china se muestra como un rival serio para los grandes y avanza firmemente hacia el objetivo de convertirse en una marca de referencia dentro del mundo móvil. HTC por su parte presentó el U Ultra y el U play, dos dispositivos que si bien poseen especificaciones interesantes (el Ultra tiene doble pantalla) no llevan lo último de lo último. ¿Serán estos dispositivos la salvación de los taiwaneses? Yo personalmente lo dudo, y si algo va hacer HTC es poner un precio elevado a estos terminales tal y como es costumbre en la marca (y así les va). O HTC se conciencia de que debe llevar a cabo una bajada generalizada en el precio de sus dispositivos o cada día que pase estará más cerca de una desaparición que, la verdad, no entiendo como aún no se ha producido, y es que debemos recordar que la situación económica de la empresa ya ha hecho que se viesen obligados a cerrar algunas de sus oficinas incluidas las de España. Quien nos iba decir hace unos meses que iba ser la marca finlandesa, si Nokia, la empresa que revolucionaría el MWC, una marca que se quedó estancada desde que decidió hacer uso de Windows Phone en sus dispositivos, una marca desaparecida desde la compra de su división móvil por parte de Microsoft, una marca líder a nivel mundial que se vio obligada a esperar años para poder volver a poner su sello en un dispositivo (debido al acuerdo llevado a cabo con Microsoft tras la compra por parte de la misma). Pues sí, Nokia y todo lo que ese nombre conlleva ha vuelto y visto lo visto lo ha hecho de la mejor forma posible. Existían muchos temores a que volviese de forma discreta, a que el regreso supusiese el fin definitivo de la marca, y nada más lejos de la realidad. En los últimos meses Nokia presentó tres dispositivos, los Nokia 3, 5 y 6. Muchas cosas podían salir mal, pero… El Nokia 6 fue lanzado en china el día 19 de enero, en ese momento existía un número de reservas superior al millón de unidades y la primera remesa que salió a la venta se agotó en menos de un minuto, si lees bien, en menos de 60 segundos el nuevo dispositivo de Nokia voló. La verdad es que me alegra que Nokia vuelva con esta fuerza, pero por otra parte resulta triste, muy triste que el móvil que mayor revuelo haya causado en el MWC fuese el Nokia 3310, una renovación de un superventas de Nokia que además de su contrastada resistencia a dado para tantos memes a lo largo de sus 17 años de vida. Pues sí, lo más comentado en la feria de telefonía móvil más importante del mundo ha sido un móvil (porque ni smartphone es) 2G, con cámara de 2 MP y una memoria interna de 16 MB, todo un prodigio de la tecnología desde luego. Por cierto, las tiendas europeas ya afirman haber recibido un número enorme de reservas del 3310. En definitiva todo parece apuntar a que este año tendremos lo mismo que el año pasado pero más caro. Pequeñas mejoras en las cámaras, en algunos casos un pequeño salto en el rendimiento y como no un salto en el precio y es que si te quieres hacer con un móvil top tendrás que realizar un desembolso medio de 750€ (y eso hasta que llegue el S8 o el nuevo iPhone) sino ya sabes, cómprate un OnePlus 3T y be happy. Vídeos de interés:
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